
No sé esconderme pretendiendo estar desaparecido y, al mismo tiempo, hallar la justificación para también estar olvidado.
Distinto es no ver de no ser visto… aunque algunos no se convenzan y vayan por ahí ayudados por antenas.
Puedo desaparecer en un hoyo, pero mi negro escondite siempre será visible: no solo el hoyo, sino también mi olor a suero de leche.
De no desaparecer, al menos permíteme ser tu perro izquierdo, tu perro lazarillo, tu perro de caza. Ladrar por cada recuerdo borrado, olfatear cada nueva ignorancia y mover la cola para espantar conciencia.
Desaparecida en un perro, no verán ni mis pupilas… pero el perro no desaparece.
(Escribo con cinco años de desfase, con frases de cien disfraces y fauces que no hallan su cauce).
Distinto es no ver de no ser visto… aunque algunos no se convenzan y vayan por ahí ayudados por antenas.
Puedo desaparecer en un hoyo, pero mi negro escondite siempre será visible: no solo el hoyo, sino también mi olor a suero de leche.
De no desaparecer, al menos permíteme ser tu perro izquierdo, tu perro lazarillo, tu perro de caza. Ladrar por cada recuerdo borrado, olfatear cada nueva ignorancia y mover la cola para espantar conciencia.
Desaparecida en un perro, no verán ni mis pupilas… pero el perro no desaparece.
(Escribo con cinco años de desfase, con frases de cien disfraces y fauces que no hallan su cauce).